El objetivo de este trabajo es que las voces, las palabras escritas, los gestos, los cuerpos que expresan que quieren “ser alguien en la vida”, trasciendan, irrumpan, sean considerados y reparados. “Quiero ser alguien en la vida”, es un enunciado que no le es ajeno a nadie, pero que nadie lo asume en su dimensión real. Se trata de una expresión que fue con el tiempo mimetizándose al ingente paisaje que recrean las desigualdades, las injusticias, las inequidades. ¡¡¡Quiero ser alguien!!!, dicen, tal vez por su condición de vida insatisfecha, o porque no se sienten reconocidos ni valorados, o porque están vinculadas a representaciones identitarias estereotipadas sobre las que actúa el aparato hegemónico dominante; o porque constituyen múltiples voces de resistencia que albergan un arsenal de reclamos y propuestas a quienes tienen la posibilidad y decisión de hacer que sus vidas sean más felizmente vividas. Lo cierto es que emergen ansias de jóvenes vigorosos, sujetos activos que imaginan un futuro para ellos con otros/nuevos sentidos, que reconstruya la sensibilidad colectiva y que se reinvente para hacerlos partícipes de la posibilidad de goceEl “andariego de lo obvio” como se definía Paulo Freire, nos invita a pensar al “sueño posible” no como una idealización ingenua, sino como aquel que “surge de la reflexión crítica sobre las condiciones sociales de opresión, cuya percepción no se vuelve determinista, sino que comprende la realidad como algo mutable a partir de la participación de los sujetos que la constituyen y son igualmente constituidos por ella. De este modo, incursionar en la lucha por los sueños posibles, implica asumir un doble compromiso: por un lado, denunciar la realidad excluyente y anunciar posibilidades de democratización y, por otro, crear las condiciones sociales que permitan concretar esas posibilidades”. Lxs chicxs quieren “ser alguien”, y alguien debe considerarlo. En “ser alguien”, nace el sueño posible de Freire.Fil : Toloza, Gabriela. Universidad Nacional de Catamarca. Argentina